28 junio 2011

¿Cómo se sentía eso?

Y llegó el día que vino alguien y me dijo cosas de mi que no me gustaron. La noche anterior había teniado una conversación sobre eso: pregunté: "¿qué dirías vos para lastimarme?" y respondió: "quizás algo que ponga en duda tu pasión". Pero no lo creí, lo imaginé y no lograba llegar a ese sentimiento. Qué suerte que me lo recordaron, acto seguido. No fue específicamente eso, sólo me dió una visión desde otro punto, desde alguien que no me conoce. Y ¡puf! ¡cómo me costó bancármelo!... pero lo hice. Respiré y pensé en tomar lo positivo, no me estaban juzgando, era una devolución, ese día, en ese ejercicio, en ese momento, visto por sus anteojos.
Me sentí mal, no me gustó nada, bueno... tampoco es que me definió como persona. Sólo que me recordó cómo se sentía que alguien te descolocara, que no estás tan segura de lo que crees estar más segura, de que ni siquiera sabés lo que es la seguridad, que estás empezando a conocer quien sos, a aceptarte y... ¡compartirlo!.
Entonces revisé qué tanta razón tenía, y pensar por qué me molestaba tanto, qué era lo que me hacía tanto ruido. Es eso, un paso en un terreno que no conocía, nuevas preguntas, nuevas dudas, más respuestas.
Hice bien en respirar, en no contestar instantáneamente, solamente concentrarme para escuchar detalladamente todo lo que decía, y no defenderme de ningún ataque.
Aprender que no soy tan genial y que no tengo por qué serlo.
Después mis compañeros me dijeron que ellos no estaban de acuerdo con lo que me dijo, y más que nada los sorprendía la visión que tuvo de mi, la cual ninguno compartía. Y me dejó más tranquila, para poder aprovechar ese desequilibrio que tuve, que tengo, que me encanta.
Puedo sentir muchas cosas. Estoy viva.

-ms
25-06

No hay comentarios.: