19 junio 2015

Caminar

Un paso de fe.
Tengo que dar otro paso de fe.
Lo reconozco porque he dado otros ya.
Conocer este miedo.
Aplicar lo aprendido. Abrazarlo. Conocerlo. Aceptarlo. Acepto el desafío. No estoy sola. Lo que me pasa es lo mejor que me puede pasar. Son maestros. Soy mi maestra. La lluvia está conmigo. Estoy viva. Me siento profundamente agradecida con la vida. Todos los sentimientos son maravillosos. Siento el agua. La lluvia que lava, que limpia, que cura, que fluye, que es amor incondicional y no escatima. Da a todos por igual. No, da a cada uno lo que necesita, lo que genera. La lluvia es una bendición, purifica el aire.
Siento el amor.
Siento el ritmo de la vida que me alienta a avanzar, a seguir, andar...
No sólo salgo por una puerta sino que entro a muchisimas otras. Abro el juego. Me entrego a la vida.


-ms

sin fecha
mayo-junio2014